La salvadora Palabra de Dios: oración
Introducción
Salmos 90: Este salmo es una oración comunitaria, que refleja la búsqueda humana para comprender el significado de la vida, particularmente a medida que la vida se acerca a su final. Esa búsqueda yuxtapone la naturaleza eterna de Dios con la brevedad de la vida. En este salmo, el Señor es llamado «nuestro hogar» y fue escrito, muy probablemente, en respuesta a la destrucción del templo en Jerusalén en el 586 a.C. Antes de aquel momento, «hogar» o «casa» en los salmos se referirían al templo.
Lectura para hoy
Eternidad de Dios y fragilidad del hombre
(1a) Oración de Moisés, el hombre de Dios.
90 (1b) Señor, tú has sido nuestro refugio
por todas las edades.
2 Desde antes que se formaran los montes
y que existieran la tierra y el mundo,
desde los tiempos antiguos
y hasta los tiempos postreros,
tú eres Dios.
3 Haces que el hombre vuelva al polvo
cuando dices: «Vuelvan al polvo, seres humanos.»
4 En verdad, mil años, para ti,
son como el día de ayer, que pasó.
¡Son como unas cuantas horas de la noche!
5 Arrastras a los hombres con violencia,
cual si fueran sólo un sueño;
6 son como la hierba, que brota y florece a la mañana,
pero a la tarde se marchita y muere.
7 En verdad, tu furor nos consume,
¡nos deja confundidos!
8 Nuestros pecados y maldades
quedan expuestos ante ti.
9 En verdad, toda nuestra vida
termina a causa de tu enojo;
nuestros años se van como un suspiro.
10 Setenta son los años que vivimos;
los más fuertes llegan hasta ochenta;
pero el orgullo de vivir tanto
sólo trae molestias y trabajo.
¡Los años pronto pasan, lo mismo que nosotros!
11 ¿Quién conoce la violencia de tu enojo?
¿Quién conoce tu furor?
12 Enséñanos a contar bien nuestros días,
para que nuestra mente alcance sabiduría.
13 ¡Señor, vuélvete a nosotros!
¿Cuánto más tardarás?
¡Ten compasión de estos siervos tuyos!
14 Llénanos de tu amor al comenzar el día,
y alegres cantaremos toda nuestra vida.
15 Danos tantos años de alegría
como los años de aflicción que hemos tenido.
16 ¡Haz que tus siervos y sus descendientes
puedan ver tus obras y tu gloria!
17 Que la bondad del Señor, nuestro Dios,
esté sobre nosotros.
¡Afirma, Señor, nuestro trabajo!
¡Afirma, sí, nuestro trabajo!
Texto clave para hoy: Salmos 90:1 ,2
Señor, tú has sido nuestro refugio por todas las edades. Desde antes que se formaran los montes y que existieran la tierra y el mundo, desde los tiempos antiguos y hasta los tiempos postreros, tú eres Dios.
Reflexiona
Este salmo comienza afirmando la naturaleza eterna de Dios y su eterno cuidado por la humanidad (versículos 1, 2), sigue con una descripción de la brevedad de la vida (versículos 3-10) y termina con una oración por redención (versículos 11-17). ¿Qué piensas respecto a los versículos sobre la ira de Dios (versículos 7-13)? ¿Qué le pide el escritor a Dios? Un querido himno, «Nuestra esperanza y protección», está basado en el Salmo 90, y sería provechoso que lo compares con las palabras del salmo.
Ora
Oh Dios, eres nuestra ayuda desde siempre, nuestra esperanza para el futuro, y nuestro eterno hogar. Lléname cada mañana con tu constante amor, y que tu favor descanse sobre mí cada día de mi vida. Amén.
Y ahora, unámonos en agradecimiento a Dios, porque los sobrevivientes del genocidio de Ruanda están experimentando sanación a través de la Palabra de Dios. Santo Dios, nos duele el genocidio de Ruanda en 1994, que mató a más de 800 000 personas, primariamente del pueblo tutsi. Pero hoy también nos gozamos de que pastores están aprendiendo del ministerio de Sanación del trauma de la Sociedad Bíblica y están ayudando a sobrevivientes del genocidio a experimentar paz y libertad verdaderas en Jesús. Dios de gracia, te agradecemos porque la gente que ha sufrido en gran manera está recibiendo Biblias y poderosos recursos escriturales. Gracias, Dios, por la generosidad de los aportantes de la Sociedad Bíblica, que están proveyendo esperanza y sanación a los sobrevivientes de esa guerra brutal. Amén.
Lectura para mañana
Salmos 91: Un salmo que expresa la confianza en Dios.